Anoche estando acostada noté que un ataque de ansiedad me atacaba (literalmente), llevaba muchos meses sin ningún amago y unos dos años sin padecer esta terrible sensación de ahogo, miedo y parálisis. Sabía que no tenía ninguna pastilla para paliar sus efectos devastadores que siempre me dejaban con el cuerpo y la mente doloridos y embotados durante horas y durmiendo un sueño más parecido a un duermevela poblado de pesadillas. Helada pero sudando notaba como el monstruo me subía desde la boca del estómago intento paralizarme de cintura para arriba lo mismo que una boa gigantesca para terminar de ahogarme. Notaba sus poderosas anillas apretándome despacio pero sin pausa.
Era un poco tarde, mis peques dormían confiados así como mis gatitas, llovía afuera, hacía cuatro días que caía un agua persistente, silenciosa pero bastante molesta; me siento viva con el sol, la claridad y si me gusta ver llover, además me encantan las tormentas pero con una medida. Y ésta lluvia tan molesta fue mi bote salvavidas, no era cuestión de llamar a algún-a conocid@, a urgencias o entregarme sin resistir.
Tenía que analizar la situación, el porqué de este brote y no dejarme vencer. Mientrás tanto la boa de mi espíritu seguía subiendo y apretando…
Ignoro cuántos de ustedes habrán padecido uno o varios ataques de ansiedad, pánico y ahogamiento, estuve durante mis años infernales padeciéndolos casi a diario y lo comparo a un viaje casi sin retorno: el pulso cabalgando como un caballo desbocado, la mente privada de racionalismo, dando más botes que un poseso y robando con desesperanza un poco de aliento, haste perdí pendientes en mi lucha particular… No siempre se piensa en la típica bolsa de plástico ni en el ejercicio respiratorio de las parturientas, se nos nublan la vista y el entendimiento.
Ayer decidí que no me iba a vencer de nuevo mis demonios, encendí la luz de la mesilla de noche, toqué mis acompañantes tibios y durmiendo como santitos confiados, y pensé que todo era culpa de la lluvia pertinaz, que mis demonios ya no tenían poder sobre mi y me obligué a escuchar mi respiración hasta que se calmase.
¡¡¡ Y lo conseguí!!! Sin alertar a nadie, sin aspavientos ni pastilla. Y estoy muy orgullosa.
Ahora viene la pregunta del millón: ¿porqué nos explicas esto? Vale, sé que muchos están estresados y sufren, un ataque de ansiedad es una simple demostración de agotamiento psíquico, sólo quiero o intento transmitir que sí, que podemos sobreponernos y no rendirnos jamás. Con tesón lo podemos lograr todo, después de la tormenta el cielo nos regala un hermoso arco iris, no nos hemos de rendir nunca.
Bueno, esto no es un consejo, es una simple historia desde una experiencia, si he podido, ustedes y vosortr@s también.
Lo deseo de todo corazón.
Hola Dominique! Acabo de leer tu entrada, me alegro de que le hayas plantado cara y tú sola hayas conseguido sobreponerte sin necesidad de nada más. Eres valiente y luchadora y tienes un corazón que no te cabe en el pecho. Por eso le ganaste la batalla a la ansiedad. Yo también he tenido alguna vez, pero hace mucho tiempo, años, y recuerdo quedar agotada de la tensión muscular.
Cuídate, eres fuerte, pero no dudes en visitar al médico si así lo vees conveniente. Te mando un abrazo grande, lleno de calma y de energía para que no te vuelva a pasar.
Un beso hermana virtual!
Querida Lilith, no creo que me haga falta ir al médico, de todas formas siempre tengo la puerta abierta de mi querida psiquiatra pero saldré adelante, si salí del infierno no pienso volver jeje. Creo que tanta lluvia me humedece las neuronas…
Un montón de gracias, merci de tout mon coeur.
Sin ánimo de consejos, ni nada que se le parezca.
Habrás leído que algo similar me sucede desde niño.
Pasé por varias etapas de pánico, y me calmaba el sentir como respiraba.
Respira. Solo respira Domi
Cada vez más profundo, concéntrate, siéntelo.
Como penetra el aire frío, y al salir lleva tu calor con él.
Beso, gigante !
M.
Gracias querido Miguel, aprendí a respirar y no es tan fácil como parece…Espero que ya no tengas estos ratos de angustia, después de faltar mi esposo cada día me pasaba pero puedo decir que ahora estoy fuera del «tormento». Que ya vale, han pasado 11 años. Supongo que fue el mal tiempo.
Un abrazo muy grande.
Muchas gracias Miguel,
Me enseñaron a respirar, no es tan fácil como parece, la última vez que estuve ingresada, ahora estoy bien, creo que fue el mal tiempo y la soledad que a veces pesa… Pero esta vez, he ganado y es un orgullo para mí. Sabes que uso mi blog como «terapia» jeje.
Han pasado ya 11 años desde la partida de mi querido esposo, duele menos con el paso del tiempo pero a veces sí que hace más daño que otras.
Un abrazo muy grande.
Bien hecho Amiga !
Y mas aún si podemos compartirlo.
Escribir es, como escucharse.
¿No te pasa ?
Que escribes algo que no sabías que lo podías escribir.
Porque ni siquiera lo pensabas.
Beso
Cuando estaba en centros psiquiátricos escribía como una posesa, me servía para «exorcizasme», ahora estos escritos sirven para otras personas que pasan por lo mismo que yo y me alegro de que puedan ser útiles. Me es más fácil escribir que hablar, supongo que por un pudor absurdo…
Un beso grande Miguel y gracias.
Cuando leo páginas y páginas de investigación sobre la ansiedad, contemplada desde una perspectiva «academíca, formal y científica» carece de la verdadera emoción, el genuino sentimiento con la que tu voz nos lo relata.
Voz que no se detiene y que reafirma la voluntad de no dejarse vencer por esa toxicidad que nos quiere envolver con mil artimañas.
Me alegro que hayas vencido esta batalla, y que sea el preludio de que el parásito se ha ido.
Un inmenso besabrazo relleno de ternura y con lazos de cariño
Gracias Cris, la verdad es que llevo una temporada chunga, la primavera me desequilibra un poco, cada año es lo mismo pero me conoces saldré adelante. Y si pierdo el norte tengo un oasis donde anclar…guíada por la rosa de los vientos.
Mandame las fechas en cuanto las sepas, hoy empieza un nuevo mes, a ver si cambia el tiempo.
Otro abrazo enorme, TQM
El tiempo va ser muy variable,hay alguien que se esta encargando de eso.
Cuidate hermanita,te envio Abrazos Sanadores.
Gracias Manolo, pues a mí los que se están encargando de desestabilizarnos lo están consiguiendo. Sabes que ando sobre una cuerda floja permanente y llevo semanas fastidiada. Dí mucho de mí con Laura, lo sabes y me ha repercutido…Pero no daré a ningún desalmado la oportunidad de dañarme.
Te acabo de mandar un correo, es buenísimo, lástima que no tenga los de Miguel y Wolfman.
Un gran abrazo a compartir, espero que todo te vaya bien.